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martes, 17 de junio de 2014

¿Dónde la sensatez?

     Se nos acaba de informar que "la prostitución, el contrabando o las drogas también serán riqueza nacional" (titular de una de las noticias). Y uno se  pregunta: ¿hay, entre los preocupados por el tema de la riqueza de la naciones, alguien mediadamente sensato, para darse cuenta de que esas actividades nunca pueden contribuir a la riqueza de una nación?

     En el cuerpo de la noticia se indica que para evaluar la riqueza de una nación se utiliza el producto nacional bruto (PIB). El PIB mide el valor de las suma total de bienes y servicios generados durante un periodo de doce meses. Pero no distingue entre las actividades económicas que realmente mejoran la calidad de vida de la sociedad y negativas que empeoran dicho estándar. Ahora se pretende aumentar estas últimas.

     Según el diccionario de la RAE, "riqueza" es la "abundancia de bienes y cosas preciosas". ¿Qué "bienes y cosas preciosas" pueden derivarse de las actividades indicadas?  La riqueza de una nación aumenta cuando aumenta el bienestar de sus ciudadanos, es decir, cuando disminuye el número de hogares sin luz ni calefacción por falta de dinero para pagar el correspondiente recibo; el número de familias expulsadas de lo que era su hogar también por falta de dinero; cuando no haya niños que tengan que comer gracias a la caridad de personas solidarias; cuando .....; cuando ....  Es una insensatez pensar que al aumentar el PIB, incluyendo en su cálculo la prostitución, el contrabando o las drogas, aumentará la riqueza nacional.

     A lo largo de los años se han llevado a cabo varios intentos de establecer una alternativa viable al PIB. El índice se bienestar económico sostenible (IBES), el indicador de progreso real (IPR), el índice de desarrollo humano de Naciones Unidas (IDH), y el índice de bienestar económico (IBE)  son algunos de los indicadores de mayor popularidad. Pero ninguno del agrado del imperante sistema económico-social, preocupado por aumentar la cifra de negocio de las grandes empresas. La crisis, cuyas consecuencias estamos sufriendo, en realidad, ha sido un golpe de Estado que ha sustituido la democracia (gobierno del pueblo) por una plutocracia (gobierno de los ricos).

Asusta constatar que la Unión Europa no haya hecho frente a ese golpe de Estado y asusta el hecho de que los ciudadanos estén tardando tanto tiempo en darse cuenta.

miércoles, 11 de junio de 2014

Dos modelos sociológicos

          A. Teoría de la elección racional              B. Teoría de la elección pública

A. Teoría que carece de base científica, defendida por el imperante sistema económico-social.
B. Teoría que se apoya en los resultados de múltiples experimentos realizados en psicología y neurociencía

A. El ser humano es individualista y egoista; se comporta como una máquina de calcular
B. El ser humano es un ser sociable, dotado de empatía; es un ser con razón y sentimiento

A. Actividades del ser humano: producir, comprar y vender
B. Actividades del ser humano: pensar, crear, sentir.


A. Desconoce la existencia de derechos humanos. Distingue dos clases de ciudadanos: a) los que tienen dinero para participar en la economía y contribuir al crecimiento económico; y b) los que no tienen dinero y, por tanto, no contribuyen al crecimiento económico. Estorban.
B. Todos los seres humanos son iguales. Nadie elige su lugar de nacimiento. Distingue entre desarrollo humano y  crecimiento económico. Considera que el crecimiento económico no puede ser un fin en sí mismo, sino un medio para aumentar el desarrollo humano.

A. Conduce al  precipicio
B. Abre el camino hacia una cooperación social próspera y pacífica.

Se hace necesario un cambio de valores. Como señalan muchos pensadores, la actual crisis, además de económica y ecológica, es una crisis de valores. Tres crisis interdependientes; las tres deben resolverse al unísono.