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sábado, 20 de mayo de 2017

Educación en economía

     Perdonen que insista en el tema del objetivo de la economía. Ello se debe a que he leído (El País, 18 de este mes), una noticia más detallada sobre lo que supone para Grecia -mejor dicho, para los griegos- este cuarto "rescate" y, por otra parte, un trabajo (El País, 5 del mismo mes) sobre Jean Tirole, Premio Nobel de Economía en 2014 y autor de un libro que ha tenido un gran éxito en Francia y que, ahora, se edita en España.
     En relación con lo que está sucediendo en Grecia, En la noticia citada, se indica que las nuevas medidas, incluyen un ajuste de entre 9% y 15% en las pensiones (el 14º recorte desde 2010), reformas energéticas (liberalización del mercado), una nueva subida de impuestos a partir  de 2020 que afectará a las rentas más bajas y una liberalización del horario comercial con más aperturas los domingos, algo tremendamente impopular -dañino- para el pequeño comercio. Se Grecia cumple las metas, podrá elevar el gasto social a partir de 2019, con subsidios para las rentas más bajas y contra la pobreza infantil ... si para entonces, queda vivo algún griego de las clases media y baja.
     Según el periodista, Andonis Paviópulos, jubilado de los astilleros de Pérama, ha visto reducirse su pensión en 35% en 2009 y ahora sufrirá otro recorte del 15%. Con lo que le quede debe mantener a sus dos hijos, desempleados, a sus esposas y a cuatro nietos, es decir, tres familias.
     En una noticia de hace unos seis meses (El País, 20 de octubre de 2016), se indicó que en Grecia se están privatizando playas, islas desiertas, sedes olímpicas, edificios históricos y campos de golf, además de aeropuertos, la compañía ferroviaria estatal y el puerto de Pireo.  (Esto no es nuevo, ha sucedido en otros países, aunque, quizá, con no tanta extensión).
     ¿Qué han hecho los griegos para que se les castigue de esa manera? ¿Por qué tienen que esperar hasta 2019 para empezar a dar de comer a los niños y niñas pobres. ¿Qué culpa tienen ellos de haber nacido en Grecia y, además, en una familia pobre?
     En cuanto a Jean Tirole, el libro que he mencionado se titula La economía del bien común. "Cuenta Tirole que empezó a escribir ese libro porque, tras obtener el Nobel de Economía, mucha gente se le acercaba con una pregunta: ¿Cómo puede la economía contribuir a mejorar la sociedad?  Quizás ello fue debido a que culminó su discurso de aceptación del Premio Nobel diciendo: "Hacer de este mundo un mundo mejor es la primera misión del economista".
     Según el periodista, Tirole apunta a la educación como elemento clave. "Y muy especialmente, la formación en economía, que considera fundamental para cualquier ciudadano al margen de su ocupación".  Contra Marie Le Pen, su receta es "más educación".   

2 comentarios:

J. Felipe dijo...

Hola Juliana

Con respecto al "objetivo de la economía", si bien debería encaminarse al bienestar de las personas, entiendo que es la propia trama ideológica la que desvirtúa la misma. ¿Podríamos suponer que tanto un economista liberal o uno socialista, pretenden el mismo fin? Si el primero asume la necesidad de una diferencia de clases y el segundo persigue una sociedad igualitaria, evidentemente no.

Yo no me atrevería a manifestarme sobre esa cuestión. pero lo que si me atrevo a enjuiciar el modelo económico como un dogma de fe. En el SXVIII convivió la fisiocracia con el nuevo liberalismo y si bien en un principio parecían dos escuelas enfrentadas, con el tiempo, los liberales fueron haciendo suyas las ideas de los fisiócratas. Dos son las más importantes: por una parte el concepto de "laissez faire" que, por desgracia ha sido uno de los primeros contribuyentes para que se desatara la crisis y de otra entender que, del mismo modo que la naturaleza por si sola actúa como un ecosistema perfecto, las leyes de la economía deberían funcionar del mismo modo.

Visto ya los resultados del primero, obviamente, el segundo siempre habrá de resultar fallido por cuanto olvida premisas que no son propias de la naturaleza pero sí lo son del ser humano: la avaricia, la codicia, el egoísmo, etc. etc. que ya de por si desvirtúan el modelo. Ahora bien, Ángela Merkel, por ejemplo ¿cree que éste diabólico modelo económico nos traerá bienestar, justicia y dignidad para todos? No te he puesto como ejemplo a un tipo como Rajoy por que evidentemente su partido asolado por la corrupción, desvirtúa aún más el caso. Francamente, no lo se pero sí que me cuesta creer que una persona como Merkel o cualquier otra a su nivel pueda creer que con sus métodos podamos construir una sociedad mejor para todos.

Termino y no me enrollo más. Por lo que respecta a Grecia, creo que lo que se ha pretendido con los griegos ha sido un escarmiento, cruel, pero un escarmiento sin precedentes en la historia moderna. Y creo que su objetivo no es tanto en perjuicio o en beneficio del pueblo griego -habría que ser muy lelos para pensar que con estas políticas ese pueblo pueda volver a salir adelante-, como poner en evidencia a Syriza ante otros grupos o movimientos de similares características que puedan tener aspiraciones a gobernar en otros países.

Sin embargo ahí está caso de Portugal. Gobierna un tripartido de izquierdas con bastante éxito y, al menos de momento, toreando a Bruselas...

Hoy me he pasado un poco.

Un saludo Juliana.

Juliana Luisa dijo...

No te has pasado. En cuanto a los griegos, coincido contigo, pero no hay derecho a hacer eso. Lo mismo sucede con los refugiados; no hay derecho a hacer lo que se está haciendo.
Teneís que perdonar que no haya contestado a vuestras indicaciones, ha sido por falta de conocimientos en Internet. Espero tenerlo resuelto.

Un saludo